carta solicitando empleo

el problema de escuchar tantas veces decirte que no, 
radica en que tarde o temprano terminaras siendo tu el que los diga.

irónico mundo lleva utilitaristas a vivir en sueños 
y a los soñadores destruir cualquier avistamiento onírico

ahora que morfeo es cajero en un banco
y rockefeller camina por una antigua vereda 
mientras el uno prepara informes para el otro,
que descansa en un arbol lejano y silencioso 

les presento mi hoja de vida 
buscando algo en lo que me puedan emplear
al fin y al cabo de algo se tiene que vivir 
pero como aun existe la noche 
por mas bombillos que se coloqen
me pueden pagar con abrazos

posdata: no acepto un no como respuesta 
Entonces me estas diciendo 
que dios es alguien, 
que me perdona antes que lo insulte,
que me da lo que necesite, 
antes de que yo sepa que lo necesito,
que sabe todo de mi, 
sin necesidad de preguntar...



Que extraño, siempre pensé que esa era mi mama.


recorrer esas piernas con la vista una y otra vez, 
no te llevara mas lejos, 
no te moverá de ahí.
La primera vez que fuimos a Bogotá
la séptima era de los carros
pero la ciudad era nuestra.

Los remedios eran simples
para la lluvia, el joropo
para el frio,
los hoteles israelitas
para el cansancio,
cantar cantando.

No existía en ese entonces 
los horarios, las agendas ni el dinero
tampoco habían los terceros

Los poemas estaban en restaurantes
y los poetas también.

La primera vez que fuimos a Bogotá 
regresamos juntos
nunca más fue así.